INTERIOR PROFUNDO
Alumnos del paraje La Petra no pueden ir a clases desde hace días por el estado de la Ruta N°31
Son al menos seis los estudiantes que no pueden llegar a la Escuela N°238 Maestro Clodoveo Alfonso porque el camino se encuentra intransitable. Cada día, corren peligro sus vidas con el único fin de poder acceder a la educación.
La realidad que viven los vecinos de parajes en San Luis se hace cada vez más compleja y esta vez quedó en evidencia en la zona de La Petra, en el departamento Pringles, donde un grupo de alumnos se ve impedido de acceder a estudiar desde hace varios días.
El inconveniente obedece al mal estado de la Ruta provincial N°31, lo que hace imposible que las familias lleguen hasta la Escuela N°238 Maestro Clodoveo Alfonso.
Si bien no es la primera vez que sucede, la falta de respuestas y los días que han transcurrido obligó a una tutora a dar luz a la problemática.
Marta Becerra está a cargo de sus seis nietos. A diario, realiza seis viajes para poder llevarlos a estudiar. Carece de recursos y su única movilidad actualmente es una moto. Así, todos los días se enfrenta a las adversidades de un camino, que varias veces le provocó accidentes.
En contacto con El Chorrillero dijo que los chicos no han podido asistir a la escuela en lo que va de la semana. Y durante 2023 la situación se ha replicado varias veces, por lo cual acumulan faltas.
Inicialmente su reclamo fue para que en la zona contaran con un transporte destinado a los estudiantes. Pero no consiguió respuestas y ahora sólo pretende que el trayecto esté en condiciones para poder hacer todos los viajes tranquila y sin poner en riesgo a nadie.
En este sentido, buscó alguna acción de parte del establecimiento. Pero la directora del primario le negó información sobre cuántas familias padecen los inconvenientes, mientras que la de la secundaria, reconoció que son varios los damnificados por no contar con un camino apto.
“La directora no me permitió hacer una reunión de padres para exponer la situación. Entonces tuve que salir a reclamar sola y empezar a moverme por mis seis chicos”, expuso.
Los problemas se intensifican cuando llueve y directamente ante esas condiciones, no van a clases tampoco.
“Tengo a los seis chicos en casa, sin ir a la escuela. Tres van a la secundaria y tres a la primaria. Hace dos años y medio que vengo renegando con el transporte. Me he cansado”, expresó Becerra.
La mujer explicó que ese trayecto sólo es apto para camiones. Y lo vivió en carne propia el fin de semana cuando regresaba de hacer compras.
“El domingo me tuve que volver en un taxi porque había ido a comprar la mercadería para toda la semana. Me tuvo que dejar en la mitad del camino porque era imposible seguir. Me dijo ‘me duele en el alma dejarla por todas las cosas que tiene que llevar, pero no puedo’”, transmitió Becerra.
Otra de las alternativas que han debido emplear es la de ir caminando, pero son siete kilómetros de ida y la misma cantidad para la vuelta los que deben recorrer. Solamente, con el fin de que no dejen sus estudios.
Sin embargo, la abuela reconoció que también esto pone en peligro a los chicos: “Cuando pasa un camión, es un guadal donde no se ven ni las manos. Si viene otro camión de atrás y los chicos están cruzando me los pueden pisar”.
“Tienen 5, 8, 10, 14, 17 y 18 años. Como no me voy a preocupar por ellos”, expuso.
Becerra mencionó que si bien tiene un auto, está roto y no lo puede arreglar porque “no alcanza el dinero”. Y en la moto ya tuvo dos accidentes.
“Me caí dos veces con los niños y gracias a Dios no nos hicimos nada. Si te caes cuando vas a la escuela, vas con todos los chicos revolcados y llenos de tierra. Viniendo no hay problema. Y si se lastiman, ¿cómo hago?”, insistió.
Tampoco cuenta con un caballo para que los chicos puedan usarlos de medio de transporte.
Así, Becerra junto a los seis chicos enfrentan a diario una travesía para que ellos puedan acceder a un derecho, el de estudiar.
Una necesidad urgente al que diputados del oficialismo le negaron el tratamiento
Fue en concordancia con esto, que este miércoles tomó estado legislativo un proyecto de declaración para que Vialidad provincial arregle el trayecto y permita el paso de los residentes en la zona. Fue impulsado por Ingrid Blumencweig a partir de que Becerra se puso en contacto con ella.
La iniciativa, que también expresaba preocupación por la situación, no pudo ser tratada en la sesión de ayer porque los legisladores que responden al Gobierno provincial se negaron.
En los fundamentos, la diputada de Unidos por San Luis planteó los reclamos existentes y el tráfico “muy intenso” por la ruta debido a que “pasan camiones cerealeros porque es una zona productiva”.
Agregó que “lo único que hace Vialidad es pasar la máquina y la ruta se va cada vez más abajo y prácticamente se ha convertido en un canal, así que cada vez es más guadal”.
Por otro lado, Blumencweig hizo referencia a que “los estudiantes que necesitan utilizar esta ruta para concurrir diariamente a la escuela de La Petra se exponen día a día a un alto riesgo de accidentes y la rotura de los vehículos”.
Y advirtió que ante este escenario, se está incumpliendo con el artículo 73 de la Consttiución provincial que “asegura la igualdad de oportunidades para la educación mediante la ampliación de las posibilidades de acceso y permanencia en el sistema”.